A pesar de que el “Teorema Bonassera” impide cualquier tipo de calificación, esta semana vamos a hacer la excepción que confirma la regla y sin que sirva de precedente voy a calificar a los jugadores, anticipando que todos, por la forma de jugar en equipo son merecedores de la más alta puntuación, es decir todos cuentan con un 10.
Portero Joel: La mayor corpulencia de los jugadores rivales presuponía que tendría un partido de lo más complicado, pero la fuerza de nuestro mediocampo y nuestros defensas impidieron que llegaran con facilidad y las pocas veces que lo hicieron, muy metido en el partido, intervino con gran acierto.
Defensas Héctor, Jiménez y Víctor: Gran partido de nuestros defensas que no se anduvieron con chiquitas y pelaron como jabatos para defender su parcela. Jiménez como siempre se empleó con gran contundencia y le dio salida al balón con gran clase. Héctor “La Roca Arbeloa ”jugó de lateral renunciando a subir la banda para emplearse a tope en defensa y Víctor realizó su mejor partido desde que está con nosotros, muy atento y seguro en todas su acciones.
Laterales Iván Vicente y Pablo Capilla: Al igual que los anteriores gran partido de ambos jugadores. En defensa cerraron muy bien sus respectivas bandas y en ataque estuvieron sobresalientes. Iván subiendo la banda una y otra vez con su habitual pundonor, clase y destreza y Pablo que en lugar de actuar como un lateral convencional dejó todo el carril para el interior Yebra, ejerciendo como un falso medio centro en la banda aportando al equipo un gran equilibrio.
Mediocentros Miguel, Joaquín y Guillén: En defensa magistrales. Todos sabemos las cualidades de Miguel en el mediocentro defensivo, pero todos desconocíamos las de Joaquín, luchador infatigable, e incluso las de Guillén en esta faceta. Los tres fueron una pesadilla constante para el medio campo rival, al que no dejaban respirar y que los dejó totalmente maniatados, incluso se emplearon con dureza cuando fue necesario. Generosos en el esfuerzo, en ataque los dos primeros no se complicaron la vida y buscaron con rapidez a las bandas o a los puntas, y Guillén siempre que pudo se incorporó a posiciones de delantero centro con su clase habitual pero sin excesivo acierto en la ejecución.
Interiores Germán, Yebra y España: Excepcional partido de los dos primeros sobre todo en ataque. Ambos hicieron honor a sus apelativos y necesitaban realizar un partido como este, el mejor de lo que llevamos de liga. Germán “El Guerrero” no paró de luchar y zafarse con los contrarios y marcó los dos goles en sendas jugadas muy similares en las que estuvo muy atento y Yebra “El Tanque” arrolló a sus partenaires de banda que no podían con su potencia. Combinando muy bien con Luis intervino en todas las jugadas de peligro e incluso sólo el gran acierto del portero le impidió marcar un gol, que sin duda mereció. España en los minutos que sustituyó a Yebra estuvo de lo más participativo y peleón, ejerciendo una gran labor de desgaste para el equipo rival.
Delanteros: Luis y Raúl Píccolo: Ambos muy solos en punta entendieron a la perfección su rol en el equipo. Luis, cuya presencia en el campo hasta minutos antes del inicio estaba en duda, pues llevaba dos días enfermo en cama fue decisivo en el devenir del encuentro. En la primera parte sólo intervino en la jugada del gol en la que habilitó a Yebra en la banda y en la segunda viéndose muy sólo en punta retrasó su posición hasta la media punta dejando la defensa rival sin ninguna referencia y saliendo a recibir el balón sin oposición para iniciar el ataque, ya fuera combinando con los mediocentros o con las bandas, en especial con Yebra con el que tuvo una química especial, y de sus botas nacieron todas las jugadas de peligro, que en los últimos minutos fueron muchas.
Por su parte Raúl cuando sustituyó a Luis entendió que poco podía hacer en ataque él sólo ante los defensas rivales, mucho más altos y fuertes, y se dedicó a hacer una gran labor de desgaste persiguiendo todas las salidas de balón y no dando un balón por perdido.
Banquillo Alonso y Mandar: A Alonso un dolor intenso en el estómago le impidió participar en el encuentro y Jorge Mandar estaba desconvocado para el partido, pero ambos animaron y participaron con su presencia en el gran triunfo del equipo.
Entrenador Nacho: Conocía muy bien al rival y lo sorprendió ganándole la batalla del mediocampo. Con el gol a favor intentó dormir el partido buscando la desesperación del rival y con el empate, a sabiendas que el resultado no le valía adelantó líneas y le dio un baño al entrenador y equipo rival.
Por otra parte dosificó las fuerzas de Germán, Yebra y Luis, que a la postre serían decisivos en los goles y en el juego de ataque del equipo.
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