Barcelona y Real Madrid vuelven a verse las caras en el terreno de juego. El próximo lunes 29 de noviembre, los dos grandes de la liga española disputarán el primer clásico de la temporada, y posiblemente el más igualado de los últimos años. Atrás quedaron los choques en los que el Camp Nou temía a los galácticos de la primera etapa de Florentino en la presidencia de la casa blanca, con un odiado Figo en sus filas. O la supremacía azulgrana que comenzó con Ronaldhino saliendo entre aplausos del Bernabéu y continuó con la vergonzosa goleada (2-6) del Barcelona al Real Madrid en su propio campo. Ha sido en estos últimos años, cuando el poderío azulgrana a aplastado sin piedad a los blancos, no solo en cuanto a enfrentamientos directos, Guardiola se lleva el pleno de victorias, cuatro de cuatro, sino también en títulos. El 'sextete' del Barcelona dolió mucho en Chamartín, donde a pesar del gran desembolso económico de Florentino, el equipo se quedó otro año a 0.
Pero este año, las cosas han cambiado. Real Madrid y Barcelona se encuentran en la cresta de la ola y el clásico no podría llegar en mejor momento de forma para ambos equipos. Primero y segundo en Liga con 33 goles a favor, disputándose el Pichichi y el Zamora y líderes en sus grupos de Champions. Barcelona y Real Madrid golean por igual, aunque los blancos aplasten al club catalán en lo que a penaltis se refiere. Cristiano Ronaldo, o Sergio Ramos en su versión menos conocida, ya ha anotado cinco.
Son dos equipos con estilos totalmente distintos, el carácter de sus entrenadores así lo revela, pero con una misma idea en la cabeza, la victoria. El Real Madrid no conoce la derrota en lo que lleva de temporada, el Bernabéu se ha convertido en un fortín del que todo equipo sale goleado, fuera de casa las cosas tampoco le van nada mal, ninguna derrota y tan solo dos empates certifican uno de los mejores arranques ligueros de su historia. Por su parte el Barça tan solo cuenta con el tropiezo de Alicante en la segunda jornada de liga, donde el Hércules le sorprendió con un sonado 0-2 en el Camp Nou. Fuera de casa los de Guardiola no han cedido ni un solo punto.